Por Catherine Dillon, EGM de Misión y Cultura, GSANZ
Para celebrar el Día Internacional de los Pueblos Indígenas del Mundo el 9 de agosto, Buen Pastor Australia-Nueva Zelanda reunidos para compartir historias y crear vínculos entre todos los pueblos.
El impacto duradero de la colonización sigue determinando la realidad de los pueblos originarios de Australia y Nueva Zelanda. Como resultado, muchas de las personas que acceden a los servicios misioneros del Buen Pastor,en particular los relacionados con la violencia familiar y el bienestar financiero, proceden de comunidades aborígenes, isleñas del Estrecho de Torres y Māori. Esto ha reforzado nuestro compromiso colectivo como hermanas y partners misioneras de profundizar en nuestra comprensión cultural y construir vínculos respetuosos e inclusivos.
Compartir historias, crear conexiones
Recientemente, los miembros de la comunidad Buen Pastor en Australia se reunieron para una videoconferencia a nivel nacional en la que participó una inspiradora oradora aborigen, Leila Gurruwiwi. Una orgullosa mujer Yolngu, Leila compartió poderosas reflexiones sobre su trayectoria vital, destacando cómo su cultura, sus mayores y sus antepasados han moldeado su identidad y le han inculcado un profundo sentido de confianza en sí misma. Como madre, también reflexionó sobre sus esperanzas para su hijo y las futuras generaciones de jóvenes aborígenes e isleños del Estrecho de Torres.
Mientras tanto, en Aotearoa Nueva Zelanda, tuvo lugar otra oportunidad significativa para el aprendizaje cultural. Las hermanas y los partners misioneros de Buen Pastor Nueva Zelanda, junto con los invitados Australianos, fueron recibidos calurosamente en Te Māhurehure Cultural Marae, un espacio tradicional de reunión Māori. A su llegada, el grupo participó en un Pōwhiri, una ceremonia maorí formal de bienvenida que honra a los invitados (manuhiri) y establece una conexión y un respeto mutuo. El día continuó con conversaciones sobre la misión y la colaboración, con elementos culturales Māori cuidadosamente entretejidos en los debates.
Caminando juntos
Estos momentos de experiencia compartida e intercambio cultural son fundamentales para nuestra misión. Al escuchar atentamente y aprender juntos, reforzamos nuestro compromiso con la compasión, la justicia y la reconciliación.