Por Elodie Fraboulet, Subdirectora del Centro Congregacional de Espiritualidad
Qué alegría para los equipos de la Casa Madre y del Centro de Espiritualidad acoger a un grupo de 22 peregrinos/as en la Casa Madre del 7 al 17 de septiembre de 2024. 14 Hermanas y 8 partners en la misión de 9 nacionalidades (Austria, Bolivia, Chile, Corea del Sur, Costa Rica, India, Irlanda, El Salvador y Taiwán) en peregrinación tras las huellas y los lugares de origen de nuestros santos fundadores, San Juan Eudes y Santa María Eufrasia.
El grupo pasó los primeros días descubriendo la casa de Angers: tiempos de oración en el oratorio de Santa María Eufrasia, visita al Museo, a la tumba, a la Gran Capilla, a la abadía San Nicolas, encuentro y tiempo de compartir con las hermanas en el sitio de Angers.
A continuación, , peregrinamos tras las huellas de San Juan Eudes. El primer momento fuerte de la jornada fue la visita a la iglesia de Ri, pueblo donde nació y fue bautizado San Juan Eudes. Después, en Cormelles le Royal, visitamos el Museo San Juan Eudes y la capilla donde se conservan las reliquias de nuestro santo fundador. El segundo momento destacado de la jornada fue el encuentro y el intercambio con la comunidad de Cormelles. Cuatro hermanas de Nuestra Señora de la Caridad pudieron hablarnos de sus misiones y de la congregación. La jornada terminó en Caen con una visita a la casa y el oratorio de San Juan Eudes.
La peregrinación de un día a Noirmoutier, la isla donde nació y pasó su infancia Santa María Eufrasia, fue otro de los momentos culminantes de la sesión. Los peregrinos visitaron la casa natal de Santa María Eufrasia y tuvimos la suerte de celebrar la misa en el oratorio de la casa. El párroco nos hizo una visita guiada a la iglesia de San Filiberto. Picnic en la playa donde Rosa Virginia jugaba de niña, con tiempo soleado. Regresamos al pueblo para una explicación histórica del castillo, antes de marcharnos de la isla por el paso de Gois.
El último día de la peregrinación estuvo dedicado a Tours. Tras dejar Noirmoutier, Santa María Eufrasia se dirigió al pensionado de Chobelet para completar sus estudios. A continuación, ingresó en el noviciado de Nuestra Señora de la Caridad de Tours. Los/as peregrinos/as pudieron visitar la catedral de Tours, donde Santa María Eufrasia iba a misa todos los días, y el primer refugio de Nuestra Señora de la Caridad donde ingresó Santa María Eufrasia, una casa que ahora pertenece a las hermanas Ursulinas.
El final de la sesión también estuvo marcado por varios momentos destacados, empezando por el encuentro con la comunidad de hermanas contemplativas, seguido de las experiencias espirituales del laberinto y el túnel, y terminando con una ceremonia de clausura en la puerta verde.
Los participantes dan testimonio de esta experiencia única, inolvidable y multicultural. Su fe creció y se fueron llenos de celo.
¡Vivamos en la misión y el espíritu de SJE y SME!
