Editado a partir de un artículo de la Hna. Hemalatha B, Refugio Mottukal, Chennai, India (Provincia de la India Central y Oriental/Nepal - CEIN)
La lucha contra el trabajo infantil ha avanzado significativamente a lo largo de los años, pero la batalla está lejos de terminar. El 12 de junio, Día Mundial contra el Trabajo Infantil 2025, reflexionamos sobre los desafíos pendientes, los avances logrados y los esfuerzos colectivos necesarios para proteger los derechos de los niños y asegurar su futuro. El lema de este año, "El progreso es evidente, pero aún queda mucho por hacer: ¡aceleremos los esfuerzos!” subraya la urgente necesidad de intensificar los esfuerzos para combatir el trabajo infantil a nivel mundial.
A pesar de años de incidencia e intervención, el trabajo infantil sigue siendo un problema preocupante. Las estadísticas recientes presentan un panorama preocupante. En 2024, se estimaba que 138 millones de niños estaban atrapados en el trabajo infantil en todo el mundo, con 54 millones de ellos realizaban trabajos peligrosos que amenazaban su salud, seguridad y desarrollo. Estas cifras son un duro recordatorio de los problemas sistémicos que perpetúan el trabajo infantil, incluida la pobreza, la falta de educación y la protección social insuficiente.
Iniciativas de Concientización de Mottukal
Uno de nuestros ministerios que se posiciona contra el trabajo infantil es Mottukal, un programa del Buen Pastor que ha impulsado el cambio desde 1996. El 12 de junio, Mottukal encabezó una serie de eventos en tres comunidades marginales: Sudhanthira Nagar, Pushpa Nagar y Ice House, en colaboración con la Unidad Distrital de Protección Infantil (DCPU) y la Municipalidad de Triplicane. Estas iniciativas buscaban crear conciencia sobre la importancia de la educación y la responsabilidad social de erradicar el trabajo infantil.
Las actividades incluyeron charlas motivacionales, durante las cuales sobrevivientes del trabajo infantil compartieron sus inspiradoras experiencias de superación de la adversidad mediante la educación y el apoyo. Una campaña de firmas invitó a los miembros de la comunidad local a comprometerse con la protección de los derechos de los niños. Para fomentar la participación pública, se realizaron dramatizaciones callejeras que ilustraron vívidamente el devastador impacto del trabajo infantil y subrayaron la urgente necesidad de intervención.
Estas iniciativas son vitales no solo para informar al público, sino también para impulsar a las comunidades a la acción colectiva. La importancia de la educación como herramienta para romper el ciclo de la pobreza y el trabajo infantil fue un tema recurrente en los eventos de Mottukal, lo que refleja su compromiso de larga data con esta causa.
El enfoque holístico de Mottukal para el cambio
La programa Mottukal, establecido en 1996, es un ejemplo destacado de un enfoque holístico para la prevención del trabajo infantil y la trata de personas. A lo largo de los años, ha generado un impacto sustancial mediante iniciativas holísticas dirigidas para abordar las causas subyacentes de la explotación.
La base de la labor de Mottukal es su hogar de acogida para niñas desfavorecidas. Este refugio seguro ofrece alojamiento temporal a niñas en riesgo de trata o explotación. El programa ofrece estancias breves, durante las cuales las niñas acceden a servicios esenciales como asesoramiento, educación y formación profesional. Al ofrecer estos recursos, Mottukal no solo aborda los riesgos inmediatos, sino que también empodera a las niñas para construir un futuro libre de explotación.
La influencia de Mottukal se extiende más allá de sus hogares de acogida. El programa colabora activamente con comunidades marginadas en los barrios marginales de Chennai, donde el riesgo de abandono escolar y trata de personas es alarmantemente alto. Mediante actividades de divulgación específicas, Mottukal trabaja para que los niños regresen a la escuela e informe a las familias sobre los peligros del trabajo infantil. Estos esfuerzos comunitarios son fundamentales para crear entornos más seguros y reducir las vulnerabilidades.
Transformando Futuros
El Día Mundial contra el Trabajo Infantil 2025 es un llamado a gobiernos, organizaciones e individuos para que redoblen sus esfuerzos. Para erradicar el trabajo infantil, la Misión Global del Buen Pastor busca abordar sus causas profundas mediante la educación, la protección social y la mejora de los medios de vida.
A través de sus iniciativas, Mottukal ha impactado innumerables vidas. Al garantizar que los niños reciban educación, protección y desarrollo, el programa no solo ha rescatado a personas, sino que también ha generado un impacto positivo que beneficia a comunidades enteras. Cuando los niños pueden aprender y crecer en entornos seguros y enriquecedores, desarrollan todo su potencial, allanando el camino hacia un futuro mejor.
El lema de 2025 – “El progreso es claro, pero aún queda mucho por hacer: ¡aceleremos los esfuerzos!” – sirve a la vez como reconocimiento de los avances logrados y como duro recordatorio de los desafíos que tenemos por delante.
La lucha contra el trabajo infantil no es solo responsabilidad de gobiernos, ONG o proyectos individuales; es una responsabilidad colectiva. Los avances logrados hasta la fecha demuestran lo que se puede lograr cuando trabajamos juntos. Pero para los millones de niños que aún se encuentran atrapados en el trabajo infantil, la urgencia de nuestros esfuerzos como red global del Buen Pastor es innegable. El progreso es evidente, pero sin duda queda mucho por hacer.
[Más información sobre el proyecto Mottukal aquí.]
