Por la Hna. Ana Cielo Matuloy, RGS (Provincia de Filipinas/Japón)
En el Espíritu del Jubileo del Bicentenario de la Fundación de las Hermanas Contemplativas, Hermanas Contemplativas y apostólicas de Filipinas y Japón — incluyendo Hermanas de los tres conventos contemplativos de Virac, Butuan y Cebú — junto con algunas Hermanas que actualmente se encuentran en misión en el extranjero, se reunieron vía Zoom para una tarde de reflexión el 25 de septiembre de 2025.
La sesión fue encabezada por la Comunidad de Nuestra Señora del Refugio en Butuan, con la Hermana Josefina Estella, Líder Local, como moderadora. La Hermana Mary Edith Olaguer, Consejera Contemplativa del equipo de Liderazgo Congregacional, ofreció su aporte sobre el tema “Re imaginando la Vida Contemplativa en el Contexto de la Complejidad Emergente”.
En su presentación, la Hermana Edith exploró la vida Contemplativa como participación consciente en la presencia de Dios. Se basó en la experiencia del Padre Pedro Arrupe al presenciar el bombardeo de Hiroshima para ilustrar cómo la contemplación inspira la acción transformadora en momentos de crisis. Enfatizó que la verdadera Contemplación implica la observación atenta de la realidad tal como es, no como deseamos que sea, y describió los cuatro preceptos trascendentales de Bernard Lonergan (ser atento, ser inteligente, ser razonable, ser responsable) , como marco para contemplación y el testimonio profético.
Su participación fue una reflexión oportuna a la luz de las apremiantes crisis globales actuales, marcadas por las guerras en curso en diferentes partes del mundo y el agravamiento de la emergencia climática. En Filipinas, los escándalos de corrupción continúan asolando el país, infligiendo un gran sufrimiento a los pobres. Estas realidades subrayan aún más la necesidad de la contemplación y el testimonio profético.

Durante las conversaciones espirituales, las Hermanas reflexionaron y compartieron sobre temas como la sanación de heridas a través del amor divino, el cultivo de una conciencia despierta para afrontar problemas sistémicos como la corrupción, y el desafío de vivir una auténtica Vida Contemplativa en Comunidad. Todas están llamadas a responder a la complejidad del mundo a través de una "mirada contemplativa" - la mirada larga y amorosa que percibe la realidad con veracidad, sin juicios ni necesidad de control, la mirada que reconoce la presencia de Dios en cada circunstancia.
En sus palabras de agradecimiento en nombre de la Provincia, la Hermana Lilly Sorop resumió la sesión y la concluyó con la siguiente reflexión: "Re imaginar no es abandonar, sino acoger. Es la Humildad de recibir lo que el Espíritu está gestando entre nosotras".



