Por Liam Michael Quinn, Responsable de Comunicaciónes

Al amanecer, en la Fiesta de Santa María Eufrasia en la Provincia de Australia y Aotearoa-Nueva Zelanda, las hermanas y los partners en misión se reunieron para reflexionar en oración sobre las palabras pronunciadas por nuestra fundadora: «Nuestro espíritu es de celo, amor, sencillez, unidad y cordialidad».

Juntos, cantaron ‘You are the Song’ escrita sobre Santa María Eufrasia por la Hna. Sr Sharon FitzGerald (+) de Aotearoa-Nueva Zelanda, y ‘The Presence You Are’ de Jan Novotka.

En pequeños grupos, reflexionaron sobre la letra de estas canciones y el significado del parternariado para la misión. La gente habló de la tenacidad, el valor y la generosidad de espíritu de Santa María Eufrasia; de cómo hablaba de no tener grandes talentos ni haber hecho nada grande y, sin embargo, amaba con toda la fuerza de su alma. Ésta era una frase de sus escritos que conmovía a la gente: que en el mundo de hoy amar con la fuerza del alma es tan importante.

Lora Bussell, Hna Johanna Mathysen, Wendy Warmington, Hna Joan Raper, Hna Noelene White y Hna Caroline Price celebraron el día en Melbourne.

En el colegio Marycove de Hong Kong, los alumnos representaron con entusiasmo en el escenario la historia de la infancia de Santa María Eufrasia y sus sueños de entrar en la vida religiosa.

En Batam, Indonesia, las compañeras de misión -conocidas como el grupo de Aguchita- se reunieron para reflexionar sobre la vida de Santa María Eufrasia. Las adolescentes que están bajo el acompañamiento de los Servicios Sociales del Buen Pastor en la ciudad también cocinaron un festín de una comida digna de una fundadora para que la disfrutaran todos los socios en la misión. A continuación, se impartieron clases de cocina a los padres de los alumnos para que aprendieran a cocinar alimentos nutritivos para sus familias (vea un vídeo de los actos aquí).

Malasia Global Shepherds y Good Shepherd Services organizaron una celebración virtual conjunta, cuyo punto culminante fue la proyección de Euphrasia the Musical  – con palomitas, aperitivos, sillones y una iluminación tenue. Fue una magnífica oportunidad para presentar al nuevo personal, la historia y la misión de Santa María Eufrasia.

En Singapur, las hermanas y partners en la misión del Marymount Centre puso fin a una semana de celebraciones de oración, unión y compañerismo organizando actividades en grupo. Para hna. Fiona, kintsugi fue la actividad más significativa, ya que repararon la cerámica quebrada remendando las piezas rotas con oro - significativo porque representaba nuestra misión de sanación y reconciliación (lee lo que compartió sobre esta actividad aquí).

Mientras el sol seguía brillando de nuevo sobre la tierra, era el momento para que los partners de la misión en Madagascar comenzaran sus festividades con las niñas a su cargo, donde reflexionaron sobre las palabras de Santa María Eufrasia que decía: «Velad por ellas, conducidlas a pastos espirituales y humanos». Fue una ocasión preciosa para rezar juntos, escuchar a los demás, crear confianza y seguir restableciendo la dignidad de cada uno de los presentes.

En Sudáfrica, se crearon espacios sagrados en los que se celebró una novena previa a la fiesta, nueve días de oración.El mismo día de la fiesta, se reflexionó sobre las palabras de Santa María Eufrasia: «Qué hacemos en este mundo y para qué estamos aquí si no es para contribuir al bienestar de nuestro prójimo». Tras la misa celebrada en Gqeberha, los niños acogidos por las hermanas recibieron suéteres y camisetas donados con motivo de la fiesta.

En el Generalato de Roma, se clausuró un triduo de oración, tres días durante el cual hermanas y partners en misión de todo el mundo compartieron cómo las enseñanzas y el ejemplo de vida de Santa María Eufrasia les influyeron y guiaron en su respuesta a la misión (vea estos testimonios aqui).

En Portugal, las hermanas apostólicas y contemplativas se reunieron en una misa especial para celebrar a la vez la fiesta de nuestra fundadora y el jubileo de 60 años de vida religiosa de Hna. María José.

Los festejos y celebraciones continuaron en toda nuestra Congregación hasta que el sol se ocultó al final del día sobre nuestras hermanas y partners de misión en la costa oeste de las Américas, con nuestros corazones llenos de un espíritu renovado, una pasión fervorosa y una nueva determinación de “salir y hacer algo bueno”.

¡Qué día tan alegre! Juntos, somos un ejemplo vivo de cómo las palabras y la vida de Santa María Eufrasia siguen inspirando, influyendo y dando forma a las vidas de sus hermanas, hermanos e hijos.

Que nuestros caminos sigan experimentando una gracia transformadora que haga que nuestras vidas reflejen el amor, la compasión y la fe viva que fueron evidentes en Santa María Eufrasia a lo largo de su vida.