Por Hna. Monique Tarabah, Estados Unidos. (Provincia de Mid- Norte America)

El liderazgo no tiene que ver con títulos o cargos, sino con el poder que llevamos dentro para crear el cambio allí donde estemos.

Mi viaje con el Liderazgo Colaborativo ha sido de transformación, crecimiento y profunda gratitud. Esta iniciativa se dedica a fomentar una nueva forma de liderazgo entre las religiosas, haciendo hincapié en la colaboración, la inclusión y la acción transformadora. Su visión es cultivar líderes profundamente arraigadas en sus carismas, sensibles a las necesidades del mundo y capaces de liderar con valentía y humildad.

Al participar en el Programa de Desarrollo del Liderazgo Colaborativo (CLDP), me involucré en un aprendizaje estructurado sobre la dinámica del liderazgo. Esta experiencia fundamental me preparó para desempeñar mis funciones de coach, mentor y presentador en el marco del liderazgo Colaborativo.

El programa CLDP fue un punto de inflexión en mi desarrollo del liderazgo. A través de sus módulos, profundicé en mi comprensión del liderazgo transformador y aprendí a navegar por complejas dinámicas de poder dentro de la vida religiosa. El programa me desafió a adoptar un estilo de liderazgo basado en la vulnerabilidad, la escucha activa y el discernimiento comunitario.

A medida que progresaba, me sentí atraída por la tutoría y el coaching, reconociendo el poder de acompañar a otros en sus viajes de liderazgo. En la actualidad, tengo el privilegio de actuar como mentora y presentadora, compartiendo ideas sobre la interculturalidad, la colaboración y evolución del panorama en el liderazgo religioso.

Uno de los hitos de este viaje con el liderazgo colaborativo fue mi contribución al libro Lideres de Esperanza, una colección de reflexiones sobre el liderazgo contemporáneo en la vida religiosa. Mi capítulo, Empoderados por la fe, explora cómo la fe y la misión sirven de catalizadores para un liderazgo transformador.

Escribir este capítulo me permitió reflexionar sobre mi rol que tuve en comunicación de Nuestra Señora de la Caridad del Buen Pastor. En este servicio, fui testigo de primera mano de cómo una comunicación eficaz fomenta la unidad, inspira el cambio y amplifica las voces de los marginadosEsta experiencia reforzó mi creencia de que el liderazgo y la comunicación están profundamente entrelazados.

A lo largo de mi viaje, he sido profundamente moldeada por el liderazgo ejemplar de mujeres que han allanado el camino para un cambio transformador. En nuestra congregación, he conocido a mujeres líderes que son faros de sabiduría y fortaleza, que dirigen con integridad, compasión y un compromiso inquebrantable con la justicia. Observar ese liderazgo, profético y profundamente humano, es una lección inestimable para equilibrar la autoridad con la humildad y la visión con el sentido práctico.

Mis experiencias con el liderazgo Colaborativo también han profundizado mi comprensión de la hermandad global y la colaboración entre carismas. En un mundo que cambia rápidamente, la capacidad de trabajar entre congregaciones y culturas es esencial para el futuro de la vida religiosa. El liderazgo Colaborativo ha proporcionado espacios en que religiosas de diversos orígenes se reúnen para aprender, compartir y co-crear un modelo de liderazgo más inclusivo y receptivo. Esto ha reforzado mi convicción de que el verdadero liderazgo no consiste en el logro individual, sino en fomentar una visión colectiva para el bien común.

Aprecio los conocimientos que he adquirido a través de Liderazgo Colaborativo y espero seguir contribuyendo a este movimiento. El liderazgo es un viaje continuo de aprendizaje y autorreflexión, and I am deeply honored to walk this path alongside so many inspiring women. True leadership , y me siento profundamente honrada de recorrer este camino junto a tantas mujeres inspiradoras. El verdadero liderazgo. No es un mero cargo, es una creencia, un compromiso para marcar la diferencia donde quiera que estemos.