Por Sarah Elbisser, Responsable de Patrimonio, Casa Madre
Desde su fundación, la Casa Madre ha acogido a hermanas y partners en la misión de todo el mundo.
Este mes, del 12 al 19 de mayo, recibimos a 14 personas de la Provincia de Singapur-Malasia, composed of Sr Kelly Ngai Sui Hin and 13 partners-in-mission who serve as Board Directors and staff for the Marymount Centre y Convento del Colegio Marymount en Singapur.
El grupo tuvo la oportunidad de sumergirse en la historia, la espiritualidad, y heritage de la Congregación, y de redescubrir sus raíces. Su estancia incluyó peregrinaciones y sesiones sobre la Congregación.
En la Casa Madre y en Noirmoutier, visitaron los lugares claves vinculados a Santa María Eufrasia.
Casmine Yeo Zhi Yi, habló de la impresión que le causó volver sobre los pasos de la infancia de Santa María Eufrasia en la hermosa isla de Noirmoutier. Como trabajadora de los servicios para la infancia, es consciente de cómo los años de formación de un niño influyen en la persona en la que se convierte. "Fue maravilloso», dijo ella, «que además de las historias, pudiéramos ver el entorno en el que nuestra Madre Fundadora pasó su infancia”.
También habló de lo "asombroso que fue conocer el trabajo real que hizo en la Casa Madre en su época, y lo mucho que se parece al trabajo que hacemos ahora en la soleada Singapur, tras el paso del tiempo y la distancia de miles de kilómetros”.
También siguieron las huellas de San Juan Eudes en el pueblo de Ri y la comunidad de Cormelles-le-Royal, en Normandía y Caen, en la iglesia de La Gloriette y la casa donde vivió y murió.
Jane Marie Ng lo describió como "una experiencia profundamente conmovedora que hizo revivir a nuestros fundadores y sus valores. El amor y la gracia de Dios fueron muy evidentes cada día y en todos los lugares a los que fuimos. Esta peregrinación me ha animado y me ha llenado de esperanza renovada". Nosotros, en el Centro Marymount de Singapur, nos apoyamos en los hombros de todos los que nos precedieron y confiamos en que Jesús, nuestro Buen Pastor, nos mantendrá fieles a su misión."
La semana ofreció a los peregrinos una mejor comprensión de la vida, el trabajo y el contexto en el que nuestros dos fundadores llevaron a cabo su misión, en particular la de San Juan Eudes, con el que estaban menos familiarizados.
Betty Lim Lai Yan habló de cómo le había impactado y recordado "del bastón que se me ha pasado como partner en la misión: llevar a cabo la misión con un ardor de humildad y amor".
Al volver a casa, a sus ministerios en Singapur, Ruby Gan Mei Hwa habló de cómo "seguir los pasos de Santa María Eufrasia y San Juan Eudes nos sirve de recordatorio del carisma inquebrantable y de las obras llenas de celo que han trazado para la humanidad. Nos da fuerzas para continuar la misión en las décadas -y siglos- venideros".
Lea otras reflexiones personales de la Hna Kelly Ngai aquí y Ruby Gan aquí.
